Messis y Xavis

Debatiendo con una mujer sobre quién es el sexo débil, si el hombre o la mujer, en la que ambos dábamos nuestras razones a favor de uno y otro género, llegué a la conclusión de que el hombre es el sexo que mas crea y define, capaz de lo mejor y de lo peor…y la mujer el sexo que mejor organiza, cuida y mas constancia tiene.

Uno de los problemas de que la propia mujer salga adelante no es que el lobo sea un lobo para el hombre, sino aun peor, la mujer es una loba para la mujer, ellas mismas se critican sin piedad, sabotean y ponen obstáculos. Vuestro mayor enemigo es usted misma y cuándo dice eso de: “Ay! Quiero encontrar al hombre de mi vida”, el amor de su vida es usted misma. Y el que lo quiere coger, que lo coja.

Valiéndome del símil futbolístico, el hombre es a Messi lo que la mujer es a Xavi.

Vale, Messi es el más determinante, el que mete goles, el que se lleva los trofeos y sale en las portadas…

Pero no es nadie sin Xavi, un tipo inteligente, aguerrido, que organiza, asiste, encuentra el hueco adecuado en el momento oportuno. Un deportista, un artista, un filósofo, un trabajador que mantiene el tempo y el orden del equipo en cada momento.

Saliendo de la comparación por un momento, qué decir de la mujer que no sepamos ya.

Una obra de arte, lo mas hermoso que haya pisado Tierra, sensible, luchadora, que mantiene unidos a los suyos, polivalente, aparte de crear un lugar acogedor y mantenerlo, cuida a los niños con paciencia y dedicación, también trabaja fuera, se pone guapa con interminables y sufridas sesiones estéticas y de vestuario. Se codea entre los de su mismo género, ante la feroz competencia y los del género opuesto incluso.

¿Qué decir de los citados magos del balón?  Lionel Andrés Messi Cuccitini y Xavier Hernández Creus. Sin unas madres que los engendraran, mantuvieran 9 meses en su interior, parieran, amamantaran, cuidaran, mimaran, ayudaran y todo lo que una madre da por su hijo, no hubieran llegado a ser lo que son.

Es por eso, queridas “Xavis” del mundo, les invito a caminar juntos hacia el triunfo de la humanidad, que es tarea de ambos. También les entrego el balón de oro honorario por el constante esfuerzo y contribución que hacen a la humanidad.